Cajas Plásticas Eléctricas de Variplast
Riesgos eléctricos comunes y pasos prevenibles
Las cajas plásticas pueden parecer una simple carcasa que sube una red de cables y circuitos, pero en verdad es mucho más que eso y una mala caja puede provocar accidentes eléctricos con consecuencias potencialmente fatales.
En Variplast sabemos que una caja plástica diseñada exclusivamente para cubrir instalaciones eléctricas, terminales, módulos, medidores, radiadores, dispensadores y todo tipo de partes dentro de una red de transmisión eléctrica, es esencial para poder tener un adecuado control de calidad y llegar a manipular normalmente el circuito de trabajo.
Los principales peligros asociados con la electricidad son las descargas eléctricas y los incendios. El choque eléctrico ocurre cuando el cuerpo se convierte en parte del circuito eléctrico, ya sea cuando una persona entra en contacto con ambos cables de un circuito eléctrico, un cable de un circuito energizado y la tierra, o una parte metálica que se energiza por contacto con un conductor eléctrico.
La gravedad y los efectos de una descarga eléctrica dependen de varios factores, como la vía a través del cuerpo, la cantidad de corriente, el tiempo de exposición y si la piel está húmeda o seca. El agua es un gran conductor de electricidad, lo que permite que la corriente fluya más fácilmente en condiciones húmedas ya través de la piel mojada. El efecto de la descarga puede variar desde un ligero hormigueo hasta quemaduras graves y un paro cardíaco.
Cajas Plásticas Eléctricas – Contrarrestan y evitan la corriente la que mata
A simple vista parecería que una descarga de 10.000 voltios sería más mortal que una de 100 voltios. ¡Pero esto no es así! Las personas han sido electrocutadas por aparatos que usan corrientes domésticas ordinarias de 110 voltios y por aparatos eléctricos en la industria que usan tan solo 42 voltios de corriente continua. La medida real de la intensidad de la descarga radica en la cantidad de corriente (amperios) forzada a través del cuerpo, y no en el voltaje. Cualquier dispositivo eléctrico utilizado en un circuito de cableado doméstico puede, bajo ciertas condiciones, transmitir una corriente letal.
Si bien cualquier cantidad de corriente superior a 10 miliamperios (0,01 amperios) es capaz de producir descargas dolorosas a severas, las corrientes entre 100 y 200 mA (0,1 a 0,2 amperios) son letales. Las corrientes superiores a 200 miliamperios (0,2 amperios), aunque producen quemaduras graves y pérdida del conocimiento, no suelen causar la muerte si se presta atención inmediata a la víctima. La reanimación, que consiste en respiración artificial, generalmente revivirá a la víctima.
Desde un punto de vista práctico, después de que una persona queda inconsciente por una descarga eléctrica, es imposible saber cuánta corriente ha pasado a través de los órganos vitales de su cuerpo. La respiración artificial debe aplicarse inmediatamente si la respiración se ha detenido.
Además de los riesgos de descarga eléctrica, las chispas de los equipos eléctricos pueden servir como fuente de ignición para vapores inflamables o explosivos o materiales combustibles.
La pérdida de energía eléctrica puede crear situaciones peligrosas. Los vapores inflamables o tóxicos pueden liberarse cuando un químico se calienta cuando falla un refrigerador o un congelador. Las campanas extractoras pueden dejar de funcionar, lo que permite que los vapores se liberen en el laboratorio. Si los agitadores magnéticos o mecánicos no funcionan, la mezcla segura de los reactivos puede verse comprometida.
Cajas Plásticas Eléctricas Evitan Recibir Descarga por Fugas o Filtraciones
Las descargas eléctricas son otro peligro común a muchos equipos de laboratorio. Cualquier elemento de equipo de trabajo alimentado eléctricamente que esté sujeto a derrames de productos químicos o agua, o que muestre signos de desgaste excesivo, debe usarse con cuidado. Las cajas plásticas aislantes evitan las filtraciones de agua, que son la causa principal de descargas accidentales.
Las descargas eléctricas ocurren cuando el circuito eléctrico se completa con la parte del cuerpo humano. Una forma en que esto puede ocurrir es haciendo contacto con una parte metálica de un equipo que se ha energizado por contacto con un conductor eléctrico. La gravedad de la descarga eléctrica depende de lo siguiente:
- La cantidad de la corriente (dada como una lista arriba)
- El camino a través del cuerpo
- La duración de la exposición
- Si la piel está húmeda o seca
Una víctima de una descarga eléctrica podría quedar inconsciente. Si la víctima todavía está en contacto con la fuente de energía activa, apáguela o presione el botón de corte de energía de emergencia antes de administrar la ayuda. No toque a nadie que todavía esté en contacto con una fuente de alimentación activa, ya que también podría electrocutarse.
Las Cajas Plásticas Eléctricas Combaten el Calentamiento resistivo
Incluso si una persona sobrevive a un episodio de shock, puede haber daños inmediatos y a largo plazo en los tejidos, nervios y músculos debido al calor generado por la corriente que fluye por el cuerpo. El calor generado es básicamente un calentamiento resistivo, como el que se generaría en los serpentines de calentamiento de un pequeño calefactor.
El alcance de los efectos de las quemaduras eléctricas externas suele ser evidente de inmediato, pero el efecto total de las quemaduras internas puede manifestarse más tarde por la pérdida de funciones corporales importantes debido a la destrucción de órganos internos críticos, incluidas partes del sistema nervioso, que son especialmente vulnerables.
Si una víctima tiene quemaduras por calentamiento resistivo; debe aplicar el “Kit para Quemados”, luego llamar al Centro de Salud.
Cajas Plásticas Eléctricas y Aislantes Reducen Fuentes de ignición por chispa
Es fundamental utilizar equipos eléctricos en buena calidad y que tengan un proceso de trabajo en donde no se puede generar fricción con la caja. Por fortuna, las cajas plásticas no produce chispas en equipos que generan cantidades considerables de vapor, como batidoras, evaporadores o agitadores.
Los sopladores utilizados en los sistemas de extracción de humos deben tener al menos aspas que no produzcan chispas, pero en situaciones críticas con vapores fácilmente inflamables que se escapan, puede valer la pena el costo adicional de una unidad de soplador completamente a prueba de explosiones.
Cualquier dispositivo en el que un circuito eléctricamente vivo hace y se interrumpe, como un termostato, un interruptor de encendido y apagado u otro mecanismo de control, es una fuente potencial de ignición de gases o vapores inflamables. Se debe tener especial cuidado para eliminar tales fuentes de ignición en equipos en los que los vapores puedan quedar confinados, como ya se discutió para refrigeradores y congeladores.
También es posible en otros equipos, como licuadoras, batidoras y hornos, y no se debe permitir el uso de tales dispositivos con o cerca de materiales que emitan vapores potencialmente inflamables.
Cajas Plásticas Aislantes – Seguridad para Instalaciones Eléctricas
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